아탈라야 I

El hotel está al lado de la playa de Canelinhas, en una zona tranquila de Portonovo; las vistas son excelentes, las habitaciones limpias, impecables, parecen recién renovadas. El buffet del desayuno es muy completo. Y el trato del personal es de 10. Totalmente recomendable.

Las habitaciones son demasiado sencillas en relación al precio. No tienen nevera. El baño excesivamente pequeño con bañera encajada en la pared. No es fácil la ducha para una persona un poco alta y complexión fuerte. Necesita remodelacion. Estábamos en la quinta planta y no se podía dormir del ruido en el tejado. Hacia algo de viento y parecía que había un huracán del sonido tan intenso y que el edificio se caeria del estruendo continuo. El desayuno básico pero aceptable. El personal desagradable, tanto en recepción como en el comedor. El trato del camarero deja mucho que desear, debería hacer un curso de buenas prácticas de atención al cliente. Nada más entrar ya parecía que nos estaba riñendo y tiene unas ideas muy rígidas y extrañas. Lo mejor es que tiene parking gratuito y en la zona no es fácil aparcar.