호텔 락 델 카스텔

El apartamento está al lado del huevo, una gran ventaja. Por destacar primero lo positivo: buena wifi, buena calefacción, camas cómodas (excepto las del sofá, son para niños pequeños). La cocina es básica (la nevera no tiene ni congelador), pero la vitro era nueva y funcionaba bien. No tiene cuchillos que corten y solo hay un cubierto, plato y vaso por persona (yo lo sabía y había llevado cosas básicas de casa). La alcachofa de la ducha no se podía regular y en la única posición posible inundaba el baño, pero tenía buena presión de agua. La decoración es lamentable: las cortinas, cuadros, mantel… son de hace 30 años mínimo, el sofá debe llevar esos años sin una limpieza a fondo porque la tapicería estaba que daba yuyu… con muy poca inversión, podría ser mucho más acogedor. Las paredes son de papel y se escucha todo de apartamentos vecinos y de la calle. Lo mejor: la atención de Andrés, está siempre pendiente.