ÍSIS Guest House

Nos alojamos durante 3 noches en una habitación doble y nos asignaron la tercera planta (33), que a la vez dispone de dos habitaciones más (31 y 32) que estaban cerradas, puesto que no las usamos, pero nos aislaban de la zona común y del ruido. Con baño privado totalmente equipado y nuevo. Habitación grande y cómoda, amplia y luminosa con aire acondicionado. Está muy bien situado a escasos metros de la catedral, en una calle peatonal con oferta en restauración. Las calles colindantes disponen de aparcamiento público de pago y servicios. En la tercera planta hay también una zona con cocina-comedor, nevera, microondas, cafetera y hervidor que pueden usar los huéspedes. Durante los tres días no vimos a nadie puesto que nos enviaron los códigos de entrada antes de llegar. Repetiríamos sin dudarlo. PD: por si puede ayuda a alguien, no dispone de ascensor.